AYA es un Espacio para la atención de niños y adolescentes, y sus familias, que presentan dificultades en el desarrollo o en riesgo de padecerlas.
El objetivo principal es que el niño y adolescente, así como sus familias, reciban la atención necesaria para favorecer y potenciar el desarrollo óptimo para facilitar la participación activa y conseguir el máximo de autonomía y funcionalidad en la realización de las actividades de la vida diaria, así como facilitar la integración en los diferentes contextos de desarrollo habituales (familiar, escolar y social).
Nuestros valores
- El niño y el adolescente como ser integral; bio-psico-social.
- El respeto absoluto hacia el niño, adolescente y su familia.
- El Juego como principal vía de expresión, comunicación y aprendizaje del niño.
- El niño, el adolescente y la familia como sujetos activos.
- Uso de la actividad significativa para el niño y el adolescente como principal herramienta de trabajo.
- La participació activa i implicació de l’infant i adolescent en el seu propi procés i, el respecte a les seves decisions.
- La implicación y participación activa con y de la familia en el proceso de su hijo/a y, el respeto a sus decisiones.
- La motivación intrínseca del niño y del adolescente como principal eje que estructura el proceso de intervención.
- Promoción del máximo potencial de desarrollo y autonomía del niño y el adolescente.
- Coordinación entre todos los agentes implicados en el proceso del niño y adolescente y su familia.
Aya es uno de los símbolos Adinkra; originalmente creados papel pueblo Akan de Ghana y Costa de Marfil en África Occidental, que representan palabras de sabiduría que reflejan la cultura y la historia del pueblo Akan.
Aya representa un helecho; una planta resistente que puede crecer en lugares difíciles. Sus hojas de forma pinada simbolizan que cuando una persona sigue el camino y persiste, las dificultades también disminuyen.
Aya es el símbolo de la Resiliencia; la capacidad y voluntad de la persona de adaptarse con ingenio, habilidad, resistencia y coraje a nuevas situaciones, superar retos que, a priori, parecen imposibles y de persistir ante las circunstancias adversas.